Periodistas héroes. Poder cómplice o asesino
Fotografía tomada de internet: http://www.elexpres.com/2015/nota.php?story_id=136769
Ján Kuciak, 27 años. Asesinado a tiros en su casa de Velka.
Daphne Caruana Galizia, 53 años. Asesinada con un coche bomba activado a distancia en su domicilio.
Kim Wall, 30 años. Su cuerpo apareció en el mar, mutilado, casi 12 días después de desaparecer.
Dimitri Popkov, 42 años. Su cuerpo fue hallado en su jardín de Minusinsk.
Saeed Karimian, 45 años, fue asesinado el 19 de abril de 2017 en Estambul por varios hombres encapuchados
Nicolai Andrushchenko, 73 años. Murió el 19 de abril, seis semanas después de haber recibido una brutal paliza
Jamal Kashoggi, 59 años.Brutalmente asesinado en el consulado saudí en Estambul. Su cuerpo todavía no ha aparecido.
Estos son solo 8 ejemplos de asesinatos de periodistas en el año 2018. Según las cifras de reporteros sin fronteras solo este año han muerto 71 periodistas y se han encarcelado a más de 330.
Casi todos los ejemplos citados arriba han sido asesinados tras sacar a la luz casos muy graves de corrupción relacionados con personas, mandatarios o altas instituciones de sus países. A la gravedad de este hecho se une la atrocidad de los métodos empleados y sobre todo la probable implicación de las personas a las que denunciaban, en algunos casos instituciones del máximo poder nacional.
Desde aquí quiero denunciar a todos los países que permiten, ocultan o silencian ejecuciones contra periodistas ejemplares en los que estén implicados altas instituciones del poder nacional.
Quiero denunciar también la desidia o falta de independencia de la justicia de estos países que deja impunes a los artífices e ideólogos de los mismos, muchas veces personas con altísimos cargos de las jerarquías de poder nacional.
Denuncio también el silencio cómplice de aquellos países que sabiendo o sospechando la verdad de lo ocurrido, aceptan sin denunciarlas las versiones ridículas que impiden poner ante la justicia a sus verdaderos asesinos, así como limpiar de una vez y para siempre los focos de corrupción y criminalidad que campan a sus aires en las cúspides de las jerarquías de poder de nuestras naciones.
Acabemos por favor con las estructuras de poder que asesinan. Acabemos con el blindaje que los jerarcas nacionales tienen dentro de sus países. Implantemos una justicia universal que no entienda de fronteras para perseguir a cualquier criminal, se encuentre éste donde se encuentre, y ocupe el cargo que ocupe.
Humanicemos el mundo y demos a estos héroes el sitio que se merecen en la historia sobre la que se asiente una nueva y tan esperada forma de convivencia.
JAJ (octubre 2018)
This work by Jose Angel Janeiro is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 4.0 Internacional License.
Comentarios
Publicar un comentario